Los cr?icos consideran a Azor? como uno de los escritores de la Generaci? del 98, y que no dejaba de escribir novelas t?icas a este movimiento: con criticismo a la oscura realidad estatal y pasi? a la construcci? de un mundo mejor. Sin embargo, las principales obras de este escritor buscan una independencia lejos de los escritores de la misma ?oca, una l?ica propia del autor sin relaci? alguna con la historia ni con la pol?ica, en contra de los entendimientos ?nicos.
Sus novelas son una duda y, a su vez, una negaci? al naturalismo que se inici?a partir de la creencia sobre el cientificismo. En una ?oca de deambulaci? de mente y de profundo caos sobre la verdad, bas?dose en una nueva filosof? ? describe la naturaleza, estudia el car?ter de los personajes y mira el mundo de la gente. Para expresar esto, el lenguaje en la novela es simple y po?ico, los personajes son inactivos y est?icos, y lo que ellos buscan es el entendimiento de golpe y la uni? con la naturaleza.
En este sentido, analizar el lenguaje, los personajes y el significado de sus obras es analizarlos relacionando con las razones de Zen. Y nos muestra que es un autor que la tendencia de nacimiento de nuevos lenguajes y el sistema de reconocimiento a trav? del encuentro con otro mundo, Oriente.
Aquellas obras simples y claras en las que las sabidur?s sobre la vida y el tiempo brillan, el punto de que en las obras no existen argumentos fijos, ni personajes principales, ni acciones dram?icas ni ocurrencias, y que prefiere lenguajes directos y simples distanci?dose de las costumbres convencionales ling茴sticas y de utilizar el lenguaje como un instrumento m?, esta perspectiva ling茴stica son las caracter?ticas de Zen que atribuyen significado a la vida sensual.
Al mirar la naturaleza, a veces, lo hace con solemnidad como si fuese un disc?ulo religioso, y otras veces, intenta comprender el eterno misterio de la naturaleza y la verdad de la vida con una nueva sensibilidad. Desde el punto de vista de que intenta encontrar la existencia suprema en el estado puro de la naturaleza, esto es muy similar a Zen.
Despu? de experimentar la uni? con la naturaleza, se goza de comprensi? interior de s?mismo al ser uno con ella. El punto de vista que insiste sobre la armon? entre la belleza y universo y entre la naturaleza y la humanidad, es muy similar a c?o mira Zen la naturaleza en su contenido y t?minos. O sea, la naturaleza es la acci? de colocar los objetos del mundo exterior dentro del coraz?, es el reflejo de la conciencia humana. Hay que valorar lo que muestra esa b?queda de la uni? entre el espiritu y la naturaleza para encontrar la verdad de Zen.
Se entiende la humildad ante la naturaleza, la verdad que supera el lenguaje en la naturaleza, sugesti? de la verdad de Zen, la moderaci? que supera la expresi? ling茴stica.
Est?muy claro que Azor? no busca activamente esas caracter?ticas que Zen espera finalmente; entendimiento profundo, pr?tica espiritual, serio af? de b?queda. Ser? una interpretaci? m? correcta, creer que hab? intentado simpatizar con la naturaleza al aceptar el marco de las razones de Chan t?icas en Europa.