Después de que las fuerzas islámicas invadieron la Península Ibérica en el año 711, los hispano-romanos empezaron a confrontar la cultura árabe y su lengua. En al-Ándalus los cristianos convivían con los árabes, judíos y berberíes, y los musulmanes no prohibieron el uso de la lengua vernácula de los mozárabes. En realidad ellos vivían en una sociedad multicultural y la mayoría de sus habitantes fueron multilingües. Lo que descubre el presente estudio es que la lengua berberí no se perdió rápidamente como piensan muches gramáticos y que ellos mantuvieron su lengua junto con so cultura per muchos siglos después de su invasión. El presente trabajo también analiza el árabs hablado en las comunidades musulmanes y mozárabes y descubre que el árabe que ellos hablaban fue una nueva variante llamada el árabs medio(o el árabe andalusí) creada por el contacto con la lengua romance.
Muchos gramáticos como Zamora Vicente ha postulado que el romance mozárabe(o romandalusí) se caractiza por su arcaísmo. Pero el presente trabajo niega esta postulación y encuentra los rasgos lingüísticos que apoyan la nueva teoría de que el romance mozárabe no fue una lengua petrifícada. En realidad el romance mozárabe no desapareció después de la Reconquista de Toledo como piensan muchos gramáticos sino que sobrevivió hasta la época de Alfonso X, el Sabio.